¿Es oportuna la elección de un “día libre” en Educación Física?
¿Qué repercusiones puede tener en la Educación Física?
Los días libres en E.F. no deberían ser recomendados. ¿Qué pensarían ustedes si el maestro de lengua, (tras un par de clases explicando la clasificación de las palabras en agudas, llanas y esdrújulas) dedicara una sesión de día libre en su clase donde una actividad alternativa estuviese permitida (por ejemplo buscar en internet información acerca de todos los diccionarios en habla hispánica existentes en la red) contrariamente a continuar la rutina de clase ordinaria? Porque lo cierto es que durante el transcurso del curso escolar lo que menos sobra es tiempo, por lo tanto, no nos podemos permitir el lujo de desviar la atención a lo que de verdad importa, que es el currículum.
Así pues, el docente que imparta el área de E.F debería sensibilizarse ante la causa de aprovechar el tiempo en esta asignatura, pues, si bien es interesante jugar al futbol, más lo será realizar unos buenos ejercicios de resistencia o explicar la teoría de un deporte en concreto. Por no mencionar sobre la separación sexista que se lleva a cabo cuando en el día libre los niños deciden jugar a futbol mientras que las niñas optan por saltar a la comba.
No obstante, si planteamos el día libre a través de actividades que ayuden a fomentar la autonomía, la responsabilidad y la igualdad entre el alumnado (como en el beisbol, donde el restado final del partido depende de la eficiencia de cada uno de los componentes del grupo igualitario) sí que llegamos a cumplir los objetivos curriculares que son nuestra competencia como docentes, llevándose así a cabo una jornada de día libre productiva. Se trata de escoger en ese día libre actividades que ayuden a cumplir los objetivos curriculares del área de E.F.
Hola Esther,
ResponEliminaNo estoy nada de acuerdo con tu postura sobre el día libre. Y la frase "desviar la atención a lo que de verdad importa, que es el currículum" me parece muy peligrosa ya que lo que de verdad importa, según tu afirmación, es cumplir con el currículo y no con las necesidades de tus alumnos.
Seguir el currículum o una programación a raja tabla dificulta mucho adaptarse a las necesidades del alumno y del grupo.
Uno de los grandes problemas, desde mi punto de vista claro está, de nuestra educación es la obsesión de la mayoría del profesorado por terminar el libro, por cumplir el currículo y tratan a los alumnos como meras máquinas que han de adaptarse a tus propuestas.
Aprovecho para comentar también un tema que se tiende a plantear como negativo y yo lo veo normal. Me refiero a si los niños en el recreo o en el tiempo libre se juntan por sexos. Aquí se mezclan situaciones de origen diferente. Una cosa es que un adulto (como el profesor) organice en su clase las actividades según el sexo y otra cosa muy diferente es que en el tiempo libre de un niño este decida jugar con gente de su mismo sexo. En este segundo caso yo no veo nada mal. Si yo quedo con amigas para irme de tiendas (porque a mis amigos no les gusta) ¿Estoy discriminando? Si prefiero quedar con una amiga para irme a Baile de salón ¿estoy teniendo una postura sexista?
Ahí lo dejo...
Un abrazo y enhorabuena por el blogg!!!
Buenas tardes, Maite
ResponEliminaEn primer lugar, desde mi punto de vista, creo que el currículum, como todo o casi todo en el ámbito educativo respecto a cubrir las necesidades de los alumnos, tiene apartados que serán más efectivos de cumplir mientras otros, por lo contrario, lo serán menos. Así pues, como futuros docentes deberíamos plantearnos aprovechar aquella parte curricular que pueda ser más efectiva para nuestros educandos, pudiendo saciar sus necesidades a la vez que podremos potenciar muchas de sus habilidades que de no seguir un programa educativo serían muy difíciles de descubrir, pues, más de una disciplina se nos pasaría por alto seguro.
Estoy de acuerdo contigo en que es una aberración tratar a los niños como "máquinas de almacenaje de conocimientos" y el primero del claustro de profesores que consiga acabar el libro el mejor. De nada sirve impartir muchísimo temario en las clases si realmente no alcanzan a aprender ni un 50% del mismo.
Lo mejor sería que todos se adaptaran a todo (el currículum al alumnado y al profesor y viceversa). Así es como se llevaría a cabo, desde, mi punto de vista, un aprendizaje útil.
En segundo lugar, la elección del juego con el grupo de iguales o con los de la misma condición sexual. Claro está, que podemos elegir o bien jugar con un niño o con una niña en -El día libre de E.F- pero ya que los docentes tenemos la oportunidad de dirigir la clase (incluso parcialmente en la negociación del día libre)fomentemos que los diferentes sexos entre sí interactuen entre ellos. Porque, efectivamente, después "de puertas del colegio hacia fuera" la niña elegirá jugar a "las barbies" con otra alumna y el niño "a la play" con su mejor amigo,por empatizar más.
Evidentemente, cada cual es libre de jugar con quién se asemeje más a su personalidad y no por eso discrimina el sexo opuesto. Pero, ya que escogen fuera de la institución educativa, dentro de la misma, que interactuen TODOS entre TODOS.
Me gusta que te guste mi blog, el tuyo también está muy bien ;)
¡un saludo!
E.S.C
¡qué grande es la dialéctica, cuando sientes pasión y esperanza en un objetivo! ... aunque este se llame educación, esta no acaba en las aulas un placer, poder leeros.
ResponEliminaMiguel Ángel ;)
Educación debe ser un objetivo ÚTIL para poder poner en práctica social, YA. Porque la educación lo es todo para el individuo a lo largo de su existencia.
ResponEliminamuchas gracias por comentar ;)
¡un saludo!